Un proyecto que se presentó en Diputados busca regular la importación de carne de cerdo. En el Senado se analiza una propuesta similar.
por Luciana Mateo
LA PLATA (Corresponsalía).- Con varias iniciativas en trámite, la oposición legislativa bonaerense se unió para defender la producción porcina de la provincia de Buenos Aires frente a la crisis que atraviesa el sector, fruto –entre otras cuestiones- de la apertura de las importaciones.
El miércoles pasado, diputados de la Provincia encabezados por Lisandro Bonelli (Frente Renovador) presentaron un proyecto para declarar de Interés Provincial la producción y comercialización de productos porcinos y de esta manera evitar la propagación de enfermedades y el ingreso de sustancias prohibidas en Argentina.
“Vemos que el sector está atravesando un momento difícil como consecuencia de las malas políticas económicas del gobierno nacional”, señaló Bonelli ante una consulta de LA CAPITAL.
En ese sentido, el diputado enumeró como agravantes la “apertura indiscriminada de las importaciones, el aumento de los costos –principalmente del alimento y los servicios- y el congelamiento del precio del kilo de carne en pie”.
“Por esta combinación explosiva muchos productores han tenido que cerrar las puertas”, aseguró Bonelli, y agregó que “los únicos que están sobreviviendo son los grandes”.
Semanas atrás, ingresó en la Cámara Alta bonaerense una iniciativa similar del senador Gervasio Bozzano (Unidad Ciudadana-FpV), que actualmente se está analizando en la Legislatura.
“Es competencia desleal”
El proyecto que Bonelli escribió junto sus pares Alejandra Martínez (Convicción Peronista) y Juan Manuel Cheppi (PJ-Unidad y Renovación) –ambos representantes de Mar del Plata- y los kichneristas Mariano Pinedo y Rocío Giaccone, propone fundamentalmente evitar “la introducción y propagación en la Provincia de enfermedades tóxicas”, como así también el ingreso “de productos y subproductos porcinos que provengan de países donde se utilizan drogas no autorizadas en Argentina para su aplicación en los diferentes procesos de la producción porcina”.
“Competencia desleal”
“Hoy -explicó Bonelli- está entrando carne de países con enfermedades que en Argentina no hay, y también de países que tienen autorizado el uso de una hormona que acelera el crecimiento –la Ractopamina-, que en nuestro país está prohibida”.
“Esto, claramente, es competencia desleal”, señaló el diputado, y pidió finalmente que “se cumpla con el estatus sanitario que tiene Argentina”.
Buenos Aires es una de las principales provincias productoras de porcinos en el país, junto con Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos. El territorio bonaerense concentra el 52% de la elaboración nacional.